Cuando me refiero a comunidades, me refiero a los ámbitos en que nos desenvolvemos diariamente.
Es la primera gran obra de Chaplin, “El Chico” (The Kid, 1921), la que ahora está en varias salas de Madrid, deslumbrando a su modo.
los objetos culturales que nos determinan, y pasamos de una concepción meramente pasiva y recreativa, de nuestra vida, a un proyecto pedagógico personal.
No es que lo último sea más importante que lo primero, sino que deben complementarse. Woody Allen nos pasea magistralmente por este drama.